Nadie es la mitad de una naranja destinada a rodar (en difícil equilibrio) en busca de su otra mitad.
Somos naranjas enteras, jugosas y ricas en sabores y matices. No estamos incompletos, pero podemos complementarnos y muy bien, con otras naranjas enteras.
3 comentarios:
naaaaaaaaa no creas las otras naranjas están malas muyyyyy malas jajajaja
Pero JM no seas hombre de poca fé!!! El mundo está repleto de naranjas riquísimas, dales un voto de confianza!
Totalmente de acuerdo... :)
http://trozosderetales.blogspot.com.es/
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